20- Trabajando por el país, en CVP
Prestaba mis servicios a la Ford en la Planta de Valencia como Gerente de Relaciones Laborales.
Una tarde, al regresar de mi trabajo, me informo mi señora, que alguien del Ministerio de Minas me había llamado y que me volverían a llamar a eso de las nueve. Así fue. Era mi antiguo compañero de estudios en el Seminario de Caracas, y luego compañero de trabajo en la Shell, el Lic. Rubén Chaparro Rojas. I
Para mi, Rubén fue siempre como un hermano.
Rubén me informo que en la CVP estaban solicitando un candidato para Director de personal. Yo le dije a Rubén que podía ser. Se concertó una entrevista en el Ministerio de Minas a la cual asistimos: el Dr. Hugo Perez La Salvia, Ministro de Minas e Hidrocarburos,el Dr. Maurice Valery, Director General de la CVP, el Lic. Ruben Chaparro R., Secretario del Ministro, y quien esto escribe. En realidad, yo me sentía muy feliz al poder prestar mis servicios a una empresa nacional y petrolera, después de haber estado unos cuantos años con empresas extranjeras.
Rápidamente llegamos a un acuerdo. Solo puse, como condición, que siendo yo un técnico en Administración de Personal, no se me impusieran, en cuanto a ingreso y egreso de personal, condiciones basadas en criterios politicos. Aceptada, ingrese a CVP un nueve de diciembre de 1971.
Una vez presentado a la Junta Directiva, como mi primer aporte se me solicito un diagnóstico, cuantitativamente hablando, de la nómina. Era un absurdo que una empresa petrolera no pudiera cubrir sus gastos operacionales y necesitara el subsidio del erario nacional.
El estudio nos llevo hacerlo algo más de un mes. Suerte que en la sección de administración de sueldos y salarios laboraban dos expertas en la materia: La Dra. Hinostrosa y la Dra. Pérez. El estudio nos arrojó dos sorpresas: A- una distorsión casi total en las remuneraciones del personal y B- una nómina excesivamente abultada; casi la mitad de la nómina podía ser considerada "sobrante".
Al presentar el estudio, la Junta Directiva no lo podía creer. Me preguntaron que se podía hacer. Había, a mi manera de ver, dos salidas. A- salir de todo el personal sobrante ; esto nos daba la oportunidad de una mejor selección del personal necesario, pero humana y políticamente no era posible ; B- aumentar las operaciones y no ingresar una persona mas, a menos que no fuera absolutamente necesario. Se decidieron por la B. Y comenzamos a trabajar. Había un equipo directivo de gran calidad. La Junta Directiva la integraban : Maurice Valery, Director General; Óscar Rojas Bocalandro, comercio nacional;José Luis Padrón, exploración; Leonardo Moleiro, comercio internacional y Ángel Esteban Sandoval ¿? .representante de los trabajadores.
Había otros Directores que no eran miembros de la J.D. : Efrain Barberii, Producción; Luis García, Refinación; Alberto Roig, administración; J. Ramirez ( no el que Uds. pensaron ), planificación y yo en Administración de personal. El reto era : cero ingreso de personal y aumento de la producción. Yo diría que el gran peso del compromiso recaía sobre el aumento de la producción y la refinación; mejorar la productividad. Teníamos la suerte que en producción tuvimos al insigne, por muchas razones, Efrain Barberii. Tenía que producir con campos marginales, como lo era Boscan e iniciar operaciones en el oriente del país. El reto se aceptó y se cumplió. Para la fecha 1971 se producían unos 30.000 b/día y se refinaban, en la pequeña refinería de Morón ( no la del Palito ), unos 6.000 b/día ; al cabo de tres años estuvimos produciendo casi 100.000 b/dia y refinando 26.000 b/dia.
Para el ultimo año de gestion de esa J.D. fuimos capaces no solo de pagar nuestros gastos operacionales, sino que logramos mejorar los sueldos y salarios del personal y entregar como ganancia liquida, al erario nacional, ese año, Bs. 400 millones, que aunque en si, no eran gran cosa, pero supusieron un gran esfuerzo y avance.
Caracas, 12 de julio de 2015
Héctor Corro I.
Serie: Anecdotas.
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